Nunca más nos miraremos con amor...

Si, creo que uno en el amor lo debe dar todo. Y dar todo significa sobrellevar las más grandes penas, permanecer erguida a las más potentes tormentas y dejar pegado eternamente el corazón en un sólo lugar: el corazón de la otra persona.

Igual así, yo me reniego en afán de ir contra el viento y la corriente. Me retuerzo y digo que ya no te quiero.

Uno puede querer con el recuerdo de las heridas en la piel.
Uno puede desear cruzándose con la muerte.
Uno puede llegar a huir del silencio estancándose en un par de labios sellados.
Uno puede desear sin pensar en el amor.

Y un día brota porque sí.
y un día porque sí me volví invencible.Traté de ponerle un poco de poesía al mundo, dándole la mano al destino.

Pero nada sirvió.

Me separé de las ilusiones llorando por dentro, cambiando mi piel por un disfraz de mijer insensible.
Hoy me retuerzo.
Parezco mezclarme con fantasmas, codearme con las sombras de un pasado invisible.

El cuerpo no se acostumbra a los arrebatos del amor, a los mordiscos en los encuen-
tros esporádicos, a los destellos de felicidad instantáneos.

Por eso escribo que no te quiero.
Por eso te extraño un poquito. Extraño eso de ilusionarme de repente. Extraño pensar que nunca más te volveré a ver.
Nunca más nos volveremos a ver.
Como antes.
Nunca más nos miraremos con ese amor...

El mundo está lleno de almas.Algunas felices, otras llorando.
El mundo está lleno de miradas desencontradas y corazones vacíos.